Cuando hablamos de Técnicas Mixtas Contemporáneas, se propone una entrada al movimiento desde diferentes experiencias, la improvisación, la experimentación corporal, la composición y también las técnicas de la danza contemporánea. Así, este seminario buscará brindar las herramientas para la asimilación del movimiento corporal desde múltiples perspectivas de creación, siendo el alumno/bailarín, intérprete el único autor/creador/ movilizador de su propio material físico, creativo y/o artístico, exteriorizando y expresando lo que lleva consigo todo el tiempo.
La danza contemporánea será la encargada de aproximar a los alumnos/bailarines/intérpretes a la experimentación del movimiento y la participación de ellos como creadores de movimientos secuenciados y personales. El seminario apuntara a la percepción del cuerpo en la danza, en la acción constante de moverse, ser consciente de que se hace y porque razón se lo hace. Intentar percibir la energía y sus ritmos cuando nos movemos será también el objetivo a conseguir, muchas veces nos movemos sin sentir realmente lo que pasa por dentro, de donde surge el movimiento, que parte de nuestro cuerpo es el que lo origina, donde es que termina, movernos desde las articulaciones, la piel, los órganos, los músculos, etc.
Las secuencias de movimientos contemporáneos permitirán buscar movimientos fluidos, orgánicos, formas de entrar al piso, formas de salir de él, deslizamientos, saltos, roladas, caídas, etc. Se pondrá el cuerpo en formación técnica/experimental logrando aprender y disciplinar nuestro cuerpo para mayores posibilidades de movimientos orgánicos, estéticos y técnicos. Se sabe que toda danza requiere de condiciones para su desarrollo corporal, la Danza Contemporánea también busca la destreza, la agilidad, la organicidad, la fluidles de movimiento, la proyección, entre tantas cosas, todos estas cualidades motrices serán buscadas de forma paulatina en las clases, entendiendo la diversidad de cuerpos y capacidad de los mismos.
Entender la diferencia de movimientos (sostenidos, rápidos, lentos, contraídos, ligados, etc.) y la experimentación de los mismos, dará a los alumnos/bailarines/intérpretes un abanico de posibilidades para moverse en el espacio, de forma variada y espontánea, con la vivencia de estas formas de transitar el movimiento el alumno/bailarín/intérprete podrá luego crear sus propias estructuras personales de movimiento, siendo el origen ésta, la Composición Coreográfica.
La disponibilidad de nuestro cuerpo para abordar los materiales infinitos de posibilidades de movimientos es la clave absoluta para entender la fluidez consciente y comprender todos estos “comodines” a la hora de “enfrentarse” a los desafíos planteados por los maestros/coreógrafos en trabajos constantes en cada alumno/bailarín/intérprete.
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